El valor de estar bien

El pasado 12 de agosto en la página de The Art of Manliness (El Arte de la Masculinidad) me encontré un interesante artículo escrito por Brett y Kate McKay que se titulaba The Courage to be Well, lo que podríamos traducir como el El Valor de estar Bien.

El artículo en cuestión trata de como cultivar el valor y el coraje en una sociedad en la que, por suerte, vivimos de forma cómoda y es difícil enfrentarse a situaciones que impliquen peligro físico o en el que podamos ser perseguidos por nuestras ideas, gustos u otros factores como la identidad, religión, etc.

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Para empezar define el valor como «la voluntad de enfrentar el riesgo, la incomodidad y la intimidación». Una definición interesante ya que la voluntad es la protagonista. Somos nosotros los que debemos decidir si actuamos con valentía.

Lo siguiente que hace el artículo es analizar como el mundo moderno ofrece escasas oportunidades para ejercitar el coraje. Hay que entender que el artículo esta orientado hacia el mundo occidental en el que vivimos. Si salimos a otros continentes la cosa cambia bastante. Aunque una parte de Europa esté azotada por la guerra —me refiero a Ucrania— es poco probable que los que me leéis entréis alguna vez en combate. Por otro lado, los riesgos laborales son cada vez menores y para obtener alimentos basta con acercarse al supermercado más próximo. No tenemos que cazar ni enfrentarnos a otros depredadores.

Desde un punto de vista artístico y cultural, a pesar del escándalo o la controversia que una obra de teatro, libro, película o cualquier manifestación artística pueda ser, más allá de unos días de polémica y clamor mediático, el autor no suele sufrir ninguna consecuencia negativa. Más aun, puede convertirse en un impulso publicitario o de promoción. Hace poco, la cantante Eva Amaral mostró sus pechos en un festival en el que actuaba y, si nos ceñimos a lo publicado en prensa, televisión y redes sociales, su gesto ha recibido bastante más apoyo que repulsa.

Por otro lado, se considera valiente a todo aquel que hace pública su condición sexual o es capaz de admitir problemas de salud mental. Sin embargo, como en el caso anterior, en nuestro mundo occidental estas actitudes suelen ser recibidas con gestos de aprobación y apoyo y, cuando se comparten en las redes sociales, se convierten en el contenido más popular de una persona, por lo que podemos decir que estas actuaciones no suelen conllevar gran riesgo y, por tanto, no necesitan de gran valor o coraje por parte del que las realiza.

La resistencia a la enfermedad parece ser el último reducto en el que podemos demostrar nuestra valentía. Pero ¿cómo podemos ejercitar ese coraje para que nos permita superar situaciones difíciles en el futuro? La verdad es que la respuesta no es fácil pero Brett y Kate nos hacen algunas propuestas interesantes que a continuación enumero:

• Ten valor para levantarte de tu silla cuando nada en tu entorno te invita a ello.
• Ten coraje para encontrar sentido a las cosas y no aceptes de forma automática las opiniones que la sociedad te lega.
• No temas perderte mucho de lo que está de moda, escapa del algoritmo y elije tu propias fuentes de información.
• Ten valor para conservar la alegría y el ánimo a pesar de que los medios de comunicación se empeñen en hacerte creer que vamos hacia la destrucción.
• Se valiente y céntrate en tus fortalezas y no en tus debilidades.
• A pesar de que el mundo que nos rodea parece haberse vuelto loco, mantente cuerdo.

Parecen cosas fáciles, pero mantener la identidad y la coherencia en este mundo, en el que la presión social para no salirse del rebaño es más fuerte que nunca, no es sencillo. Sé tú mismo, no seas un borrego.