Sal de la burbuja informativa. Burla el algoritmo.

Imagen de Moses Mehraban

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¿No te ocurre a veces que las sugerencias que te ofrecen tus redes sociales o tus feeds de noticias son demasiado acordes con tus opiniones o con tu forma de pensar? Parece cómo si alguien te estuviera leyendo el cerebro y te presentara aquello que quieres leer, escuchar o comprar. Pues no, ni es magia, ni te están leyendo el cerebro. Simplemente, somos prisioneros de los algoritmos.

En principio, la idea no es mala. Gran parte del uso que hacemos de Internet tiene que ver con nuestros hobbys y aficiones. Y si la máquina es capaz de encontrar ese producto que nos interesa rápidamente, pues mejor. Yo soy un amante del heavy metal y, búsqueda tras búsqueda, like tras like, youtube y otros servicios de streaming me proponen nuevas bandas y estilos que me pueden interesar. Lo mismo pasa con otra gran afición mía cómo es la fotografía.

El problema no está a la hora de practicar nuestros hobbys o en el momento de planificar un viaje. Que los algoritmos se adelanten a tus deseos puede ser una poderosa herramienta. Lo malo surge cuando lo que perseguimos es estar bien informados y comprender mejor la actualidad y el mundo que nos rodea. Y no es fácil, ya que todos tenemos sesgos y prejuicios que trasladamos a nuestras búsquedas, clics o material que compartimos con nuestros amigos, alimentando así a los algoritmos.

Mucha gente se informa a golpe de titular, con las noticias y enlaces que les reenvían sus amigos. Los algoritmos toman nota y cada vez les ofrecen contenidos más acordes con sus ideas y sentimientos. Al final, se crea una burbuja que solo deja pasar aquello que nos agrada y sobre la que rebotan aquellos contenidos que no nos son placenteros.

No se trata de renunciar a nuestros principios e ideas, sino de acceder a más versiones de la realidad de forma que podamos comparar, analizar y adoptar nuestras propias posiciones.

Cómo ya he señalado, todos tenemos prejuicios. Incluso los comunicadores más independientes tienen su propia visión de la realidad con la que dan forma a las noticias que nos presentan. Esto no es negativo, sino serían simples máquinas que escupirían información aséptica sin analizar. De lo que se trata es de poder comparar hechos y opiniones que no siempre tienen porqué ser contradictorias, pueden ser complementarias y ser nosotros mismos los que después decidamos como interpretar la realidad.

Entonces, ¿cómo luchamos contra los algoritmos de Internet y rompemos la burbuja? Os voy a dar un par de ideas:

1. Diversificar nuestras fuentes de información con un feedreader

En vez de acudir a las distintas páginas de periódicos, lo mejor es agruparlas en un feedreader o agregador de noticias. Yo uso feedly. Estos agregadores funciona de la siguiente manera: tú les vas suministrando fuentes de noticias, enlaces a periódicos, blogs, etc. y la aplicación te las presenta conforme se van actualizando. De esta forma, en una sola aplicación tienes acceso a tus páginas favoritas, de forma que ganas tiempo.

La clave es incluir medios de distintas tendencias. De esta forma, puedes comparar y tener una visión más amplia.

2. Think tanks

Tenemos acceso a mucha información, pero esta suele llegarnos en bruto o en forma de titulares. No siempre tenemos tiempo de digerirla y analizarla. Para eso tenemos los think tanks. Un think tank suele ser una organización que genera opinión y pensamiento. Los hay de todos los tipos y tendencias. Suelen publicar newsletters semanales analizando distintos temas de actualidad. Lo suyo es suscribirse a varios, a ser posible de diferentes tendencias.

Cómo veis, no es difícil burlar los algoritmos que nos encierran en burbujas informativas. Solo hace falta tener un poco de voluntad y de espíritu crítico.

Comentarios

  1. Evitar la burbuja cada vez será más inevitable, hay que ser consciente de ello como primer paso. El resumen del libro "Filtro Burbuja" va en la línea de tu post, enhorabuena. https://mochilaliderazgo.blogspot.com/2020/08/21-el-filtro-burbuja.html

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