Navega anónimamente con el navegador TOR y accede a la DarkNet
En mi artículo dedicado a la deep web prometí hablaros de la red TOR. Y como lo prometido es deuda, aquí va un post dedicado a esta red.
Uno de los temas más controvertidos en el mundo de Internet es la protección de la privacidad y el anonimato en las comunicaciones. La privacidad de las comunicaciones es un derecho protegido por nuestra Constitución en su artículo 18. Sin embargo, si te lees los términos de servicio de, por ejemplo Gmail, verás que has aceptado que lean tus correos.
El anonimato es todavía más difícil de conseguir. Cookies, términos de servicio o datos sobre tu navegación que, al menos en España, queda almacenada durante seis meses en tu proveedor, hace que cualquier cosa que hagas en la gran red de redes quede registrada. En mi post dedicado al buscador DuckDuckGo os conté hasta que punto Google sabe de vosotros.
Si esto pasa en estados democráticos, imagínate la amenaza que se cierne sobre las cabezas de los internautas que viven en estados autoritarios.
Es más, existen contenidos a los que solo puedes acceder si tu IP está localizada en un determinado ámbito geográfico. En consecuencia, necesitamos una herramienta que nos permita navegar libremente. Una de ellas es TOR.
Tor lo componen un conjunto de nodos que se interponen entre tu máquina y el servidor que pretendes visitar. Los diferentes datos de la conexión se cifran a modo de capas en cada nodo —de ahí el nombre onion— dificultando la detección del origen de esta.
Estos nodos alojan una de las DarkNets más conocidas que recibe el mismo nombre: TOR.
Tanto para acceder a los nodos como para entrar en la DarkNet necesitas un software especial. La forma más fácil de hacerlo es descargando el navegador oficial del proyecto TOR: el TOR browser que puedes descargar desde aquí
Logo del proyecto TOR
Tor Project, CC BY-SA 3.0, via Wikimedia Commons
Una vez instalado, puedes navegar anónimamente por Internet. Prueba a visitar con tu navegador habitual la página Cualesmiip.com y anota los datos que te proporciona sobre tu IP y localización. Luego haz lo mismo con el TOR browser. ¿A qué son distintos?
A cambio de este anonimato tienes un precio que pagar, la velocidad de navegación. Esta sufre cierta ralentización debido al enrutamiento entre los distintos nodos.
Ahora veamos cómo acceder a la DarkNet. Las urls de esta red son muy especiales y nada intuitivas. Son del tipo sdf78a6a8sfd6a876f.onion. Así que lo mejor es acceder a directorios como The hidden Wiki cuyo enlace es el siguiente:
http://zqktlwiuavvvqqt4ybvgvi7tyo4hjl5xgfuvpdf6otjiycgwqbym2qad.onion/wiki/index.php/Main_Page
También puedes emplear el buscador torch e indicarle un término de búsqueda. Lo tienes aquí:
http://xmh57jrknzkhv6y3ls3ubitzfqnkrwxhopf5aygthi7d6rplyvk3noyd.onion/cgi-bin/omega/omega
Facebook también tiene su versión onion que se encuentra en el siguiente enlace:
https://www.facebookwkhpilnemxj7asaniu7vnjjbiltxjqhye3mhbshg7kx5tfyd.onion/
Además, mientras navegas con el TOR browser, si una página tiene una versión onion, te sale un simbolito como el de la captura que te pongo a continuación.
En cualquier caso, ya os digo que la DarkNet os va a decepcionar un poco. Es lenta y la verdad que no tiene mucho contenido.
Y para acabar, un consejo: sed buenos y no os metáis en líos.
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