Por qué escucho heavy metal

Muchos de mis amigos y conocidos se sorprenden de que sea un gran aficionado al heavy metal. No les parece normal que un casi cincuentón, casado y con hijos se enfunde de vez en cuando en unos vaqueros ajustados y se ponga por encima una camiseta negra decorada con monstruos demoniacos. Si te mueves en este mundillo, sabrás que no hay un estereotipo de jeviato. No todos los heavies llevan el pelo largo, son jóvenes o visten a diario camisetas negras. La verdad es que en un concierto de metal te encuentras con todo tipo de personas. No importa tu edad, tus estudios, tu situación económica o tu trabajo. En cualquier extracto social te puedes encontrar a un metalero.

Desde un punto de vista objetivo, no hay una razón lógica para argumentar por qué te gusta una cosa: te gusta y ya está, del mismo modo por el que te gusta un tipo determinado de comida, un color o una película. Aun así, podemos vislumbrar algunos de los motivos que hacen que este género musical sea tan especial.

Es genuino

Casi todos, por no decir todos, los grupos de metal componen sus propias canciones. Esto no es solo una característica metalera, casi todos las bandas de rock componen sus propias obras. No suele ocurrir lo mismo con el pop y otras fórmulas. Sin embargo, este yo me lo guiso, yo me lo como hace que los músicos sean más profesionales y que se curren mejor sus trabajos.

Es variado

Creo que ningún género musical tiene tantos subestilos y tan diferentes. Puedes escuchar Heavy Metal clásico, Metal melódico, Black Metal, Death Metal y un sinfín más. Desde lo más suave a lo más brutal. Además, no solo es diverso en cuanto a la música, sino también en relación a los temas: historia, fantasía, religión, compromiso social; lo que tu quieras.

A pesar de las diferencias un metalero es un metalero

Puedes ser un thrasher y encontrarte en una fiesta o en un festival con un apasionado del glam (buscad por Internet y veréis las tremendas diferencias), pero desde el momento en el que descubras que el de enfrente es metalero, seréis colegas. Empezaréis a hablar de los conciertos y festivales a los que habéis asistido, de los discos que tenéis en casa, de las bandas que os gustan…

Es cultura

Sí, es cultura. Cuando te adentras en el mundo del metal y analizas muchas de las letras, alucinas con las fuentes e influencias que tienen los distintos grupos. Desde literatura clásica a temas históricos, pasando por física cuántica o ciencia ficción. Escuchar heavy es una ocasión buenísima para investigar y aprender.

Foto tomada en el festival de Wacken (Alemania) en 2018

Es divertido

No tienes más que ir a un festival para verlo. La gente se disfraza, se emborracha sin malos rollos, hay camaradería… y nadie se mete con nadie.

Y si no te gusta, no pasa nada. Tú te lo pierdes.

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