Cómo la matriz de Eisenhower puede ayudarte a salvar el día

¿No te has sentido alguna vez saturado en el trabajo sin saber por dónde empezar? En cinco minutos los encargos del jefe, el correo electrónico y una serie de llamadas telefónicas hacen que nuestra lista de tareas crezca exponencialmente y nos agobiamos porque no sabemos qué hacer primero.

Para solucionar este problema tenemos una herramienta que se llama Matriz de Einsenhower. Por si no sabes quien era Dwight D. Eisenhower, te cuento que fue un militar y político estadounidense nacido en Texas en 1890 y fallecido en Washington D.C. en 1969. Fue el 34.º presidente de los Estados Unidos entre 1953 y 1961. Como militar, fue el comandante supremo de las tropas aliadas durante la Segunda Guerra Mundial y planeó el desembarco en Normandía.

Cuando Ike (que era su apodo) se veía abrumado por el trabajo dibujaba un eje de coordenadas que dividía en 4 cuadrantes. En el cuadrante superior izquierdo anotaba aquellas tareas que eran importantes y urgentes; en el superior derecho, aquellas tareas que eran importantes pero no urgentes. El cuadrante inferior izquierdo lo reservaba para aquellas tareas que, siendo urgentes, no eran importantes; y el inferior derecho para aquellas tareas que ni eran importantes ni urgentes.

Una vez clasificadas las tareas, el proceso es el siguiente:

• Tareas urgentes e importantes: Se hacen inmediatamente.
• Tareas urgentes pero no importantes: Se delegan en alguien que pueda hacerlas.
• Tareas importantes pero no urgentes: Se decide que hacer con ellas y se programa como y cuando hacerlas.
• Tareas que no son ni urgentes ni importantes: Directamente se descartan.

Como veis, es un sistema rápido y fácil de emplear. La questión está en saber discernir qué es importante y qué no lo es. Pero eso es otro problema.