Ferrocarril de mercancías. La asignatura pendiente de la logística española.

En unos tiempos en los que la descarbonización de los medios de locomoción es un mantra constante, choca constatar que, en España, el 95% de los transportes de mercancías se hace por carretera, frente al 5% que se hace por ferrocarril.

RENFE presume de mover mas de 6 millones de toneladas por kilómetro. Sin embargo, en 2020 se transportaron más 240.000 millones de toneladas por kilómetro de carretera. Algo falla en el sistema pues, a priori, el transporte por carretera es más caro. No hay más que pensar en el volumen que puede portar un camión frente a la capacidad de un tren. Sumemos los gastos en combustible —y más ahora—, los sueldos de los camioneros y la contaminación generada, queda claro que el transporte por ferrocarril es mucho más eficiente.

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Se podría alegar que el transporte por carretera es mucho más flexible. Es cierto. Pero el problema no es ese. Es de infraestructuras. Nuestro país presume de ser el que más kilómetros de vías de alta velocidad ha desplegado en Europa. Por lo tanto, el problema está en la prioridad que se ha dado a las infraestructuras. Se ha optado por mover pasajeros frente a mercancías. Si se hubiera invertido un poco más en grandes estaciones con muelles de carga, aprovechado las vías abandonadas en pos de la alta velocidad y promocionado una flota de locomotoras y bateas, se habría dado una alternativa atractiva al transporte por carretera, quedando este último para los portes de «última milla» y los servicios urgentes.

Si queremos un transporte verde y sostenible, no queda más que apostar por el ferrocarril. ¿Hay voluntad para ello?

Comentarios

  1. Anónimo5/5/22, 19:13

    Estoy muy de acuerdo contigo, veo una reflexión muy lógica

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